
En mi dictadura ideal no hay guerra, y no hay personas hambrientas. Como en Costa Rica, no hay militares. El clima es muy bueno. Toda la gente tiene un trabajo, y todos van a ganar igual.

Cada viernes toda la gente comería taco y bebería coca cola. ¡Todos los viernes son fiestas de taco!

Todos los hospitales deben ser libres, y todos deben recibir la ayuda que necesitan.
Eso es mi dictadura perfecta.